El gobierno socialista de Mallorca gasta 60.000 euros en un concierto preelectoral independentista

El gobierno socialista de Mallorca gasta 60.000 euros en un concierto independentista preelectoral que tendrá lugar los próximos días seis y siete de mayo en la localidad mallorquina de Sa Pobla, pueblo natal de la presidenta del Consell, Catalina Cladera (PSOE) y que será organizado por la entidad afín al independentismo catalán, Joves per la Llengua.

Al ser año electoral y pese a la crisis que padecen miles de familias mallorquinas donde la tasa de riesgo de pobreza y de exclusión social se sitúa en el 22,4%, con ingresos medios de 11.235 euros por persona (según informe del INE), la cesta de la compra más cara de España y el grueso de la población excluida del mercado de compraventa inmobiliaria, Cladera tira de la chequera pública de los contribuyentes y triplica la subvención a esta entidad.

Si en 2022 fueron 20.000, ahora serán 60.000 euros, los que abonará a este colectivo para poder organizar el Acampallengua 2023. Un festival en el que el grupo estrella será Antònia Font. Una formación musical vinculada al movimiento independentista, que defiende la imposición del catalán, canta sólo en esta lengua y participa en actos y conciertos a favor del rapero Valtònyc, condenado por la Audiencia Nacional por enaltecimiento del terrorismo, injurias al Rey y amenazas.

Un grupo que está de enhorabuena este año donde el mes de enero fue contratado por el alcalde socialista de Palma, José Hila, por un disparatado coste de 341.000 euros, muy por encima del precio de mercado y de cantantes más conocidos, como Malú, Rozalén o Raphael. En esta ocasión a los independentistas de Joves per la Llengua les saldrá el concierto más barato con el añadido de que acompañarán a este grupo otras bandas como Auxili, Mar Grimalt, es Gall de sa Pastera, Antònia Found System, o Plan-ET.

La concesión de esta subvención a dedo, nominativa según el acuerdo oficial que será aprobado por el pleno ordinario que el Consell celebra este jueves 13 de abril, es la última entrega realizada esta semana por el Consell a entidades de Mallorca vinculadas al independentismo, caso de la Obra Cultural balear (OCB) o los conocidos como los espías del catalán por vigilar el uso de esta lengua en diferentes patios de recreo de colegios catalanes, la Plataforma per La Llengua.

Tanto una como otra entidad, han sido agraciada con otro pellizco desde las arcas públicas insulares, de 13.000 y 19.000 euros respectivamente. Una de las variadas entregas de dinero público a estas entidades que, en este caso, se destinarán al desembolso del alquiler de los locales de sus sedes; reparaciones, mantenimiento y conservación; suministros; material fungible y bienes consumibles; primas de seguros; tareas de coordinación, administración y hasta limpieza de los mismos.

Todo, por tanto, les saldrá gratis a ambos colectivos, con el añadido en el caso de la OCB, de que la institución insular ya ha acordado recientemente con el Ayuntamiento de Palma, que pagará también la reforma de las dos sedes propiedad de la entidad en la capital balear.

A estas aportaciones hay que unir una ampliación en hasta 85.000 euros para la producción y la edición, en cualquier formato, tanto físico como digital, de libros, audiolibros, fonogramas y juegos de mesa en lengua catalana. Si durante 2023 se presupuestó para extremo 400.000 euros, ahora la cantidad se amplía con esta aportación adicional.